Si utilizamos el microondas para descongelar pescado, retiraremos el glaseo con agua, lo pondremos en un recipiente con rejilla para separar el jugo y a un tiempo corto en el micro.

Para descongelar los productos envasados al vacío, los sumergimos en agua fresca dentro del mismo envase y el contraste de temperaturas hará el trabajo por nosotros.

Saber cuándo está listo el pescado es tan fácil como tocarlo con una cuchara. En el momento en el que notemos una textura firme sabremos que está en su punto de cocción.

Aunque pensemos que hay que descongelarlo previamente, cuando cocinamos pescado a la papillote no es necesario hacer este paso. Podemos cocinarlo sin ningún problema y no perderán ni un ápice de su sabor.